jueves, 20 de diciembre de 2012

IKEBANA DE LA ABUNDANCIA

Muchos elementos a incorporar en esta composición de Ikebana previa a las fiestas navideñas.

Flores de Anturium, ramas de boj, ramas secas, piñas blanquadas por nieve artificial, hojas...

Todo cupo en esta ocasión bajo los criterios de la simplicidad y la harmonia que marca este ancestral arte japonés.

Incluso el vacío, siempre necesario en esta técnica, está presente.

En la vida, consciente o inconscientemente, rechazamos a veces la abundancia, incluso cuando sólo tenemos que alargar nuestras manos para prenderla.

Somos merecedores de la abundancia, y debemos incorporarla a nuestras vidas de manera equilibrada y razonable.

A por ella pues.

domingo, 16 de diciembre de 2012

IKEBANA DE LA PROFUNDITAT

No és un quadre, ni una pintura, ni un dibuix.

Un art més semblant a l'escultura, on la tercera dimensió és el que atorga l'harmonia a la composició.

Les branques i flors s'han de disposar així per expressar tota la força del moviment.

Del mateix mode a la vida, tot no és blanc o negre, dalt o baix, dreta o esquerra. Hi ha matisos i profunditat a les coses i a les persones.

A eixos matisos hem d'atendre, si volem viure la plenitud de tots els aspectes de la vida.

domingo, 18 de noviembre de 2012

EL IKEBANA EN LA PALMA DE LA MANO


Nuestra mano es el modelo en que se inspira esta milenaria técnica del IKEBANA que armoniza en la composición  floral todos los elementos naturales.

Ramas altas como los dedos, y otras que recogen sutilmente toda la composición, como el pulgar.

Podemos concluir que en nuestras manos guardamos toda la fuerza de la naturaleza, que aguarda para impulsar nuestros proyectos personales y profesionales.

La técnica concreta de esta composición es el PAISAJE, y los elementos son el Eucalypto, el Lylium, la Monstera y la Poligala.

domingo, 11 de noviembre de 2012

LA GRANDEZA DE LAS METAS


A veces, hay que moderar el protagonismo de uno mismo en beneficio de las metas a conseguir.

Esta composición de IKEBANA en su modalidad de shin so ka lo representa perfectamente, ya que el Io, normalmente representado por la flor principal, se representa en este caso por unas hojas verdes de un tono claro.

Sin embargo, lo elevado, aquello a lo que aspiramos, el shin y el hikae, vienen representados aquí por las vistosas rosas amarillas, cuando lo habitual es utilizar para ello ramas más discretas.






martes, 23 de octubre de 2012

EL IKEBANA ÁRDUO


Largo período transcurrido desde mi último IKEBANA. Este trabajo utiliza la técnica de MORIBANA o representación del paisaje.

En esta ocasión el proceso de elaboración fue árduo. Finalmente la composición ganó en armonia mediante la búsqueda de desequilibrios, y el refuerzo de tanto del TOME (la base) como el IO (uno mismo) representado aquí porpor los crisantemos rosas.

Tomando prestada esta enseñanza del IKEBANA, en la vida a veces es importante recuperar la confianza en uno mismo, para de este modo, armonizar contratiempos y reforzar posiciones.


jueves, 28 de junio de 2012

LAS RAMAS SECAS DEL REENCUENTRO


Tras meses de no practicar este reconfortante arte tradicional japonés, tuve la oportunidad de hacerlo gracias a la invitación de mi iniciadora maestra de IKEBANA.

El reencuentro fue pacificador y oportuno, pues el IKEBANA ayuda, a través del contacto silencioso y ordenado con las plantas, a calmar la mente y el cuerpo. Cuestiones no baladíes en los tiempos que corren.

Una enseñanza concreta del trabajo realizado en esta ocasión derivó del uso combinado ramas secas con las plantas vivas. Lo seco, lo quebradizo, lo desechado nos puede servir para reforzar el resultado final de la composición, en algo tan sutil, pero tan importante, como la orientación que toma el eje del trabajo al figurar el mecimiento por el viento.

Aplicado a la vida, no debemos desdeñar o lamentar las aparentes etapas anodinas, vacías o secas que puedan sobrevenirnos... bien al contrario, pueden atesorar la clave para redirigir nuestro camino.


lunes, 24 de octubre de 2011

EL VACIADO EN IKEBANA


Es necesario desprenderese, vaciar y cuidar todo aquello que queda, para que, mediante la atención en los matices, el resultado sea bello y armoniso.

Para que ello ocurra, nada debe competir en nuestro interior... ni tan sólo los espacios vacíos.

Simples y profundas enseñanzas que nos enseña esta disciplina japonesa de arte floral, en su modalidad MORIBANA, en la que se reproducen paisajes.

Se utilizó pitosporum, jazmín y gerberas para la composición.